Una joven rescata a una niña que un hombre con el rostro oculto secuestró en un coche

El raptor, con un pasamontañas, introdujo a la mejor en la parte trasera de un vehículo con los cristales oscuros. «Mi hija ha vuelto a nacer», aseguran los progenitores de la chica de Atarfe, mientras la policía intenta dar con el agresor

Diario Sur, ANTONIO MANSILLA, 28-01-2008

Una familia de Atarfe ha vivido una trágica experiencia. Su hija de doce años ha sufrido un intento de secuestro. Los hechos ocurrieron el miércoles pasado, pero sigue marcando el día a día de esta familia, que reside en un bloque de pisos de la calle Gonzálvez de la localidad granadina. Ayer mismo, mientras los padres de la menor atendían a este periódico, sus teléfonos móviles no dejaban de sonar. Amigos y personas allegadas se interesaban por el estado anímico de la menor tras haber sufrido la experiencia.

La niña salió de su piso sobre las seis menos diez de la tarde camino de la casa de una compañera del colegio para hacer los deberes juntas. Ambas están cursando primero de la ESO.

Cuando la niña iba andando por la acera escuchó varias veces una voz que salía de la ventanilla de un coche. El conductor le decía una y otra vez que se subiera mientras circulaba a muy baja velocidad para ir a la par que la menor. Según la versión de la niña, tan sólo se le veía la boca y los ojos, pues el conductor llevaba puesto un pasamontañas.

Según relataron los padres, la niña comenzó a andar de forma más rápida, ya que no entendía muy bien lo que estaba ocurriendo. Los padres indicaron que era la primera vez que un desconocido le pedía que se subiera al coche con voz autoritaria. Cuando se aproximaba ya a su domicilio, el conductor aceleró y a unos metros paró en medio de la calle. Bajó del coche y se colocó delante de la niña.

Cristales oscuros

Con todas sus fuerzas la abrazó y tras arrastrarla haciéndole presión en los hombros, para inmovilizarle los brazos, la introdujo a la fuerza de un empujón en la parte trasera del vehículo. El coche llevaba los cristales oscuros. La menor nunca olvidará, según relató una y otra vez a sus progenitores, que se acurrucó en torno a su cabeza. Ella pensaba que la iba a matar, y que nunca más podría ver a sus padres.

Sin embargo, una joven de unos 19 años y de etnia gitana, según pudo precisar la menor, fue la que llegó con su ciclomotor a la altura del automóvil y comenzó a decirle que se bajara. A la vez abrió la puerta, que no tenía el seguro puesto, y tras repetirle que saliera del coche en dos ocasiones, la niña le tendió la mano y la sacó del turismo.

La menor recuerda que mientras salía el hombre con el pasamontañas intentaba meter una marcha, pero estaba muy nervioso y le temblaba la mano, por lo que cuando comenzó a andar, la menor estaba subiéndose al ciclomotor de color negro y amarillo de su salvadora. La joven que le sacó del coche le dijo: «Pon un pie aquí». Frase que recuerda la menor con gran alegría ya que fue el instante en que la pesadilla empezaba a terminar.

Escaparon en moto

El conductor – todavía con el pasamontañas puesto – , persiguió a la motocicleta por varias calles. Sin embargo, lo despistaron rápidamente por las callejuelas del casco urbano de Atarfe. La joven del ciclomotor, tras preguntarle a la niña, la dejó en casa de la amiga con la que había quedado para estudiar. Cuando la menor entró en la casa de la amiga su cara estaba totalmente blanca y lo único que pudo hacer es contárselo a la amiga y posteriormente regresar a su casa.

Ahora, estos padres, que son muy conocidos en Atarfe, intentar localizar a la joven que salvó a su hija para agradecérselo. Todo el mundo que ha sabido de esta historia piensa lo peor. Pero por suerte, como asegura la madre: «Mi hija ha vuelto a nacer». Ha tenido mucha suerte de poder encontrar a la joven que presenció la agresión al meterla en la parte trasera del vehículo; y el valor de acercarse y abrirle la puerta del coche y salvarla.

En la mañana de ayer domingo, los agentes barajaban una serie de pesquisas con las que podrían estar haciendo el perfil del presunto secuestrador, y sobre todo el tipo de coche en el que pretendió llevarse a la menor. La investigación podría completarse y llevarse a buen término en el supuesto de que aparezcan testigos de la persecución.

Por otra parte, la búsqueda clave en este asunto se centra también en tratar de localizar a la joven de étnia gitana que ayudó a la niña a salir del coche del presunto secuestrador. La joven que busca la familia para que pueda aportar más datos del delincuente tiene unos 19 años, y su pelo es largo y negro, de piel morena y los ojos almendrados.

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