R. L. Vargas
MADRID- Las autoridades mauritanas se negaron ayer a readmitir a cincuenta inmigrantes que llegaron al mediodía al país africano en un vuelo de repatriación fletado por las autoridades españolas desde Fuerteventura. Según explicaron fuentes policiales, Mauritania tiene suscrito un convenio por el cual se compromete a readmitir a todos aquellos inmigrantes que hayan llegado a España sin papeles y en pateras con origen en su territorio, pues ha adquirido la obligación de hacerse responsable de sus costas. En el avión que voló ayer viajaban, según los consultados, subsaharianos que habían partido de Mauritania, según tenían documentado las autoridades españolas. Sin embargo, sus homólogos africanos no reconocieron tal extremo y aseguraron que tres de las embarcaciones en las que habían llegado a Europa los ahora repatriados no salieron de su país.
A la una y media de la tarde, el avión en que fueron trasladados los inmigrantes volvió a Fuerteventura con el medio centenar de policías que los habían escoltado a bordo pero sin los repatriados.
Las complicaciones de tan rocambolesca devolución no terminaron ahí. A su llegada a las Canarias sobre las cinco y media de la tarde, otro contingente de cincuenta inmigrantes esperaba para ser trasladado a Mauritania, pero los dos pilotos del avión se negaron a partir porque ya habían cumplido el número de horas de vuelo que tienen permitido. Hasta casi las nueve de la noche no llegó un nuevo comandante que se hiciera cargo de la nave, pero para entonces el contingente había crecido hasta los 90 inmigrantes y el número de agentes que había para custodiarlos era de 50. «Esto va en contra de toda medida elemental para la seguridad de los agentes», esgrimieron desde los sindicatos policiales SUP, CEP y UFP. El protocolo de repatriaciones que han estado negociando en los últimos meses estas organizaciones con la dirección policial establece, de hecho, un mínimo de dos agentes por inmigrante repatriado como número idóneo de policías para garantizar la seguridad de los vuelos.
Muchos policías del operativo, además, empiezan sus vacaciones hoy, y este incidente será un grave trastorno para sus planes pues, en el mejor de los casos, y si el vuelo se hacía, tal y como estaba previsto al cierre de esta edición, llegarán a Madrid hoy por la mañana.