Nace el primer niño inmigrante en el CETI

La madre, Gweró Osawaru, de 27 años, llegó ayer de Ceuta a bordo de una patera.

La Voz de Galicia, Efe, 05-12-2007

Gweró Osawaru, de 27 años, es el nombre de la primera mujer africana que ha dado a luz en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), donde en la madrugada de ayer nació el hijo de esta mujer que llegó a Ceuta a bordo de una patera.
La mujer entró clandestinamente en la ciudad ceutí el pasado día 21 de noviembre junto a otro grupo de inmigrantes subsaharianos y pakistaníes que habían pagado a una red de inmigración ilegal para acceder desde las costas de Marruecos.
Gweró Osawaru, que permanece ingresada en el hospital civil de Ceuta, ha asegurado a los periodistas que entró en una patera tras pagar una cantidad económica cuya cifra exacta dice no conocer a un marroquí para llegar al territorio nacional.

La mujer ha manifestado que su deseo era dar a luz en España ya que se encontraba en un avanzado estado de gestación cuando decidió subirse a la patera junto a otro grupo de 11 inmigrantes que fueron arrestados por la Guardia Civil al llegar a la orilla, en las inmediaciones de la playa de Benzú.

La africana, natural de Nigeria, fue trasladada al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes, donde en la madrugada de ayer dio a luz en la sala de Enfermería del recinto, convirtiéndose en la primera mujer que alumbraba en este lugar desde su apertura en el año 2000.

Gweró Osawaru ha indicado que su intención es que su hijo «se críe con salud» y cuenta que tiene un familiar en el CETI, por lo que su presencia en la ciudad ceutí le animó a iniciar la aventura de emigrar.

Tanto Gweró Osawaru como su hijo permanecen ingresadas en el hospital del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA), donde será dada de alta en las próximas horas y se trasladará al CETI, a la espera de poder viajar hasta la península para tramitar su regularización oficial en España.

Mientras tanto, la Delegación del Gobierno ha felicitado al personal del CETI por la profesionalidad y diligencia demostrada en la atención a esta mujer.

La inmigración clandestina suele tener, en ocasiones, historias entrañables como la protagonizada por esta mujer y su hijo.

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