El Gobierno canario augura una fractura social si no se ataja el paro entre los inmigrantes

ABC, 05-12-2007

AYOZE GARCÍA

LAS PALMAS. El consejero de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Jorge Rodríguez, presentó ayer las partidas presupuestarias de su departamento para 2008, que tachó de «continuistas» en la mayoría de aspectos, salvo en las políticas de empleo. En ese área anunció Rodríguez que se introduciría un «cambio radical» para dar respuesta a la «preocupante» situación que atraviesa el mercado laboral del Archipiélago.

En los distintos planes de empleo que prepara la Consejería se contemplan «medidas específicas» para mejorar la formación de los residentes canarios («sin importar donde hayan nacido», matizó Jorge Rodríguez), luchar contra la economía sumergida y establecer acuerdos de colaboración con países del continente africano. El objetivo, según detalló el consejero, es «dar las mismas oportunidades a la gente que ya reside en Canarias» a la hora de competir en el mercado de trabajo. En este sentido, desde el Ejecutivo autonómico se señala que buena parte de los empleos que se crean en las Islas los ocupan extranjeros «que acababan de llegar», al tiempo que el desempleo se incrementa entre el resto de la población inmigrante y desciende sólo «ligeramente» en el caso de los nacidos en Canarias.

«Sé que esta es una materia delicada – explicó Rodríguez – , pero si no la afrontamos ahora podemos tener problemas graves en el futuro». Además, el actual escenario de «desaceleración de la economía» va a «afectar a la creación de empleo», de modo que según advirtió el consejero el problema podría agravarse: «Si no somos capaces de prevenir esta situación y se crea una bolsa de 100.000 o 200.000 inmigrantes en paro, vamos a tener una situación de tensión social importante. Canarias no es una tierra racista – prosiguió Rodríguez – , pero si se produce una desestructuración social podrían darse entonces brotes xenófobos».

Para el consejero, la capacidad de acogida de la sociedad y el territorio del Archipiélago tiene una capacidad limitada: «Hemos integrado a muchísimos inmigrantes porque antes nosotros lo fuimos también: el 22 por ciento de los trabajadores de las Islas son extranjeros, por encima de la media nacional, pero en el futuro no podremos seguir creando empleo al mismo ritmo». De momento, el Gobierno canario ha destinado alrededor de un millón de euros para el desarrollo de políticas transnacionales de empleo: «Queremos llegar a acuerdos con países fronterizos o cercanos a Canarias para que formen a trabajadores que puedan venir de forma legal a trabajar a las Islas, en avión y no arriesgando su vida en el mar». Jorge Rodríguez estimó que entre 50.000 y 100.000 africanos podrían beneficiarse de estos permisos temporales en sectores como la construcción.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)