Los defensores de los salvadoreños buscarán que les otorguen una visa humanitaria a cambio de testificar sobre el hecho.

Nos patearon por todos lados, pensé que nos iban a matar, con esas palabras Demar José Sandoval Arana, de 14 años, describió los golpes que supuestamente recibió por parte de agentes de la Patrulla Fronteriza mientras era detenido al ingresar indocumentado a Estados Unidos.

El 6 de noviembre en la madrugada, Sandoval junto a Marlon Giovany Martínez, de 15 años, y Carlos Alberto Orellana, de 32, fueron sorprendidos por oficiales de la Patrulla Fronteriza en el Valle Imperial, al sur de California, cuando trataban de llegar a San Diego.

Según el testimonio del menor, varios hombres que se desplazaban en moto y portaban uniformes verdes los rodearon.

Nosotros nos tiramos al suelo para que nos arrestaran, pero ahí nos comenzaron a dar puños y patadas, mi padrastro botaba sangre por la boca y yo también, manifestó Sandoval vía telefónica desde el hogar de paso del Servicio de Inmigración, donde se encuentra recluido.

El caso fue denunciado por Rosa Emma Arana, madre del menor. La compatriota, originaria de Cuscatancingo, esperaba poder ver a su único hijo después de dos años de separación; sin embargo, lo único que recibió fue una llamada de Orellana que le relataba la agresión de la que habían sido víctimas: Él todavía es un niño, precisamente me lo traje porque allá en El Salvador las maras estaban presionándolo para que se uniera a ellos, y justo pasa esto.

Rosa y el padre de Martínez buscaron ayuda en el consulado de Santa Ana y en la organización pro inmigrante Centro de Leyes Casa Cornelia, en San Diego.

Según la cónsul en Santa Ana, Ana Bessie de Recinos, los dos menores tuvieron que ser remitidos a un hospital para una revisión médica por parte de las autoridades del Servicio de Inmigración, y actualmente se encuentran bajo custodia de la agencia en espera de que se defina su situación migratoria.
Buscarán visa

Por su parte, Sue Lake, abogada de Casa Cornelia, aclaró que la organización buscará una visa humanitaria que le permita a los jóvenes salvadoreños permanecer en Estados Unidos a cambio de dar su testimonio de la agresión. Los dos menores y el adulto tendrán que presentarse ante un juez de Inmigración el 6 de diciembre.

Así mismo, voceros de la Patrulla Fronteriza del área del Valle Imperial confirmaron que se está adelantando una investigación sobre el hecho.