IBARRA. DV. La nueva quincena intercultural que celebra cada año el pueblo de Ibarra por estas fechas quedó inaugurada el pasado lunes por la tarde.

La interculturalidad es un concepto cada vez más importante en Ibarra, que con el tiempo, se está convirtiendo en un municipio de acogida para personas de diferentes culturas. En esta ocasión, el pueblo de Ecuador y el del Sahara han sido los escogidos para intercambiar arte, ideas, tradiciones y cultura en general. Así, Pablo Butrón, cónsul de Ecuador y Madadi Benamaz, representante del Frente Polisario de Sahara han sido los invitados de honor. Ambos representantes hicieron acto de presencia en la inauguración y fueron recibidos por los bailes de varios miembros Alurr Dantza Taldea, así como por un pequeño recital realizado por niños de Loatzo Musika Eskola de Ibarra.

Pablo Butrón, cónsul de Ecuador, destacó durante la presentación la buena acogida que siempre han obtenido los ecuatorianos que se asientan en Ibarra. «Es la tercera vez que visito el pueblo de Ibarra y me gustaría reiterar mi agradecimiento por el buen trato y el cariño que dicen recibir aquí mis conciudadanos. Esta quincena intercultural no es más que una nueva demostración», comentaba el cónsul.

Por su parte, Badadi Benamaz, representante del Frente Polisario, recordó las fatalidades que atraviesa el Sahara y la injusticia internacional que se está comentiendo con su pueblo. Con relación al Sahara, además, miembros de Tolosaldea Sahararekin ofrecerán el día 28 la conferencia ‘Viaje al campamento de refugiados del Sahara’.

Talleres culturales

La exposición colectiva se ha formado con las obras de los artistas ecuatorianos Fabricio Cajas, que además aportará un documental, las de Juan Manuel Fernández, que ha realizado diferentes exposiciones en diversos lugares de Europa y América, así como con la colaboración de Gonzalo Pérez. Pero este intercambio no sería tal, sin aportar obras de arte realizadas por los ibartarras. Así, participan también las personas que toman parte en el taller de pintura de la casa de cultura. Dedican su tiempo libre a la pintura y a las dos exposiciones que organizan anualmente, suman esta otra, con la intención de estrechar lazos entre culturas.