ixel.gonzalez@eluniversal.com.mx

México no sólo es un país receptor de remesas sino también un emisor de estos recursos para Centroamérica.

Natasha Bajuk, encargada del programa de remesas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), expresó en entrevista con EL UNIVERSAL que hay un porcentaje importante de centroamericanos que viaja a México y envía remesas desde México.

Un ejemplo de ello es el caso de personas que emigran de Guatemala a México, aunque hay otros corredores también entre Costa Rica y Nicaragua que son cada vez más importantes, indicó.

La especialista expresó que una de las tendencias más importantes que vemos de los resultados de la más reciente encuesta Remesas en América Central 2007 del BID es el desarrollo de los corredores intrarregionales de remesas, y efectivamente, México forma parte de esto.

Desafortunadamente, al momento no existe una medición certera sobre el monto de remesas familiares que salen de México.

Al respecto, funcionarios de Banco de México comentaron que es difícil indentificar una remesa familiar respecto a otras operaciones financieras dirigidas al exterior.

Sobre el caso particular de las remesas que salen de México a otros países de Latinoamérica, consideraron que, a diferencia de las remesas que entran hacia México, el mercado no es muy grande todavía para este tipo de operaciones, pero estamos trabajando con empresas financieras y no financieras para identificarlo.

De acuerdo con el más reciente estudio de remesas del BID, México ocupa, junto con otros países de Centroamérica y Sudamérica, el segundo lugar, después de Estados Unidos, como remitente o emisor de remesas, al enviar 7% del total de las remesas a países centroamericanos como El Salvador, Guatemala y Honduras.

Humberto López, economista senior del Banco Mundial y especialista en remesas, comentó a EL UNIVERSAL que los llamados flujos de migración Sur – Sur comienzan a ser cada vez más importantes.

En el caso de México, esto ocurre principalmente con la población centroamericana, apuntó.

Perfil migratorio

En los últimos seis años se observaron crecimientos importantes en el número de inmigrantes. Cifras del Instituto Nacional de Migración indican que entre 2000 y 2006 el flujo de extranjeros que se internaron legalmente con el fin de radicar en México casi se duplicó, al pasar a 47 mil 566 personas. En 2006 permanecieron en México 15 mil 822 extranjeros.

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México no sólo es un país receptor de remesas sino también un emisor de estos recursos para Centroamérica.

Natasha Bajuk, encargada del programa de remesas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), expresó en entrevista con EL UNIVERSAL que hay un porcentaje importante de centroamericanos que viaja a México y envía remesas desde México.

Un ejemplo de ello es el caso de personas que emigran de Guatemala a México, aunque hay otros corredores también entre Costa Rica y Nicaragua que son cada vez más importantes, indicó.

La especialista expresó que una de las tendencias más importantes que vemos de los resultados de la más reciente encuesta Remesas en América Central 2007 del BID es el desarrollo de los corredores intrarregionales de remesas, y efectivamente, México forma parte de esto.

Desafortunadamente, al momento no existe una medición certera sobre el monto de remesas familiares que salen de México.

Al respecto, funcionarios de Banco de México comentaron que es difícil indentificar una remesa familiar respecto a otras operaciones financieras dirigidas al exterior.

Sobre el caso particular de las remesas que salen de México a otros países de Latinoamérica, consideraron que, a diferencia de las remesas que entran hacia México, el mercado no es muy grande todavía para este tipo de operaciones, pero estamos trabajando con empresas financieras y no financieras para identificarlo.

De acuerdo con el más reciente estudio de remesas del BID, México ocupa, junto con otros países de Centroamérica y Sudamérica, el segundo lugar, después de Estados Unidos, como remitente o emisor de remesas, al enviar 7% del total de las remesas a países centroamericanos como El Salvador, Guatemala y Honduras.

Humberto López, economista senior del Banco Mundial y especialista en remesas, comentó a EL UNIVERSAL que los llamados flujos de migración Sur – Sur comienzan a ser cada vez más importantes.

En el caso de México, esto ocurre principalmente con la población centroamericana, apuntó.

Perfil migratorio

En los últimos seis años se observaron crecimientos importantes en el número de inmigrantes. Cifras del Instituto Nacional de Migración indican que entre 2000 y 2006 el flujo de extranjeros que se internaron legalmente con el fin de radicar en México casi se duplicó, al pasar a 47 mil 566 personas. En 2006 permanecieron en México 15 mil 822 extranjeros.