NY no dará licencias a los indocumentados

El Universal, Redacción, 14-11-2007

El gobernador de Nueva York, Eliot Spitzer, piensa abandonar sus planes de otorgar licencias de conducir a los migrantes indocumentados, porque “la oposición a la medida es demasiado abrumadora” como para seguir adelante, informó ayer el diario The New York Times.

El gobernador, quien dará a conocer su decisión de manera oficial el día de hoy, dijo en una entrevista concedida al Times que no le fue fácil tomar la decisión: “Tal vez me han visto luchar por (otorgar licencias a los indocumentados) porque pensé que teníamos una decisión en principio y no es necesariamente fácil dar marcha atrás”.

Sin embargo, Spitzer llegó a la conclusión de que la propuesta eventualmente sería bloqueada, ya fuera por medios legales o por un voto en la legislatura que negara financiamiento para el Departamento de Vehículos Motores.

“No estoy dispuesto a luchar hasta el amargo final por algo que en última instancia no será instrumentado”, dijo el gobernador a The New York Times. Agregó que “también tenemos una gran agenda para otros asuntos de gran importancia para el estado de Nueva York, que estaban siendo bloqueados por la constante y casi singular concentración en este asunto” de las licencias.

Según el diario neoyorquino, el plan del gobernador desató un debate nacional sobre si emitir licencias para los inmigrantes indocumentados hacía que el estado fuera más seguro o extendería, impropiamente, un privilegio a los ilegales que debería ser reservado sólo para aquellos que llegan al país de manera legal.

De hecho, el periódico indica que la oposición a la propuesta de Spitzer provocó que cayera su popularidad en las encuestas y prácticamente estancó su agenda. Ahora, es probable que su decisión constituya una alivio para muchos de sus simpatizantes demócratas en Albany y en Washington, quienes temían que la emisión de los citados documentos podría afectar la temporada electoral del año entrante.

En la entrevista, siempre según el Times, el gobernador sonaba decepcionado pero resignado. Reconoció que sería criticado por cambiar el curso en el asunto de las licencias por segunda vez en tres semanas. “Parte del liderazgo es escuchar a la oposición del público. Habiéndola escuchado y habiendo evaluado las realidades de implementar esta política, parte del liderazgo es darse cuenta de que conseguir resultados es más importante que apegarse a lo que podría ser una postura por principios”.

The New York Times recordó que el gobernador neoyorquino dio a conocer en septiembre pasado su intención de conceder licencias de manejo a los indocumentados, bajo el argumento de que quería dar a sacar a los indocumentados de las sombras.

Pero la propuesta, que fue formulada sin consultar con otros políticos, provocó una respuesta más severa de lo que la administración había contemplado. Se prevé que el cambio de Spitzer complique aún más sus relaciones con los legisladores hispanos.

El gobernador de Nueva York, Eliot Spitzer, piensa abandonar sus planes de otorgar licencias de conducir a los migrantes indocumentados, porque “la oposición a la medida es demasiado abrumadora” como para seguir adelante, informó ayer el diario The New York Times.

El gobernador, quien dará a conocer su decisión de manera oficial el día de hoy, dijo en una entrevista concedida al Times que no le fue fácil tomar la decisión: “Tal vez me han visto luchar por (otorgar licencias a los indocumentados) porque pensé que teníamos una decisión en principio y no es necesariamente fácil dar marcha atrás”.

Sin embargo, Spitzer llegó a la conclusión de que la propuesta eventualmente sería bloqueada, ya fuera por medios legales o por un voto en la legislatura que negara financiamiento para el Departamento de Vehículos Motores.

“No estoy dispuesto a luchar hasta el amargo final por algo que en última instancia no será instrumentado”, dijo el gobernador a The New York Times. Agregó que “también tenemos una gran agenda para otros asuntos de gran importancia para el estado de Nueva York, que estaban siendo bloqueados por la constante y casi singular concentración en este asunto” de las licencias.

Según el diario neoyorquino, el plan del gobernador desató un debate nacional sobre si emitir licencias para los inmigrantes indocumentados hacía que el estado fuera más seguro o extendería, impropiamente, un privilegio a los ilegales que debería ser reservado sólo para aquellos que llegan al país de manera legal.

De hecho, el periódico indica que la oposición a la propuesta de Spitzer provocó que cayera su popularidad en las encuestas y prácticamente estancó su agenda. Ahora, es probable que su decisión constituya una alivio para muchos de sus simpatizantes demócratas en Albany y en Washington, quienes temían que la emisión de los citados documentos podría afectar la temporada electoral del año entrante.

En la entrevista, siempre según el Times, el gobernador sonaba decepcionado pero resignado. Reconoció que sería criticado por cambiar el curso en el asunto de las licencias por segunda vez en tres semanas. “Parte del liderazgo es escuchar a la oposición del público. Habiéndola escuchado y habiendo evaluado las realidades de implementar esta política, parte del liderazgo es darse cuenta de que conseguir resultados es más importante que apegarse a lo que podría ser una postura por principios”.

The New York Times recordó que el gobernador neoyorquino dio a conocer en septiembre pasado su intención de conceder licencias de manejo a los indocumentados, bajo el argumento de que quería dar a sacar a los indocumentados de las sombras.

Pero la propuesta, que fue formulada sin consultar con otros políticos, provocó una respuesta más severa de lo que la administración había contemplado. Se prevé que el cambio de Spitzer complique aún más sus relaciones con los legisladores hispanos.

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