EL PERIÓDICO
MADRID

La Confederación Española de Policía (CEP) se sumó ayer a los avisos del Sindicato Unificado de Policía (SUP) y advirtió de que hay “indicios suficientes” de que se produzcan nuevas acciones “violentas” por la coincidencia en el centro de Madrid de varias manifestaciones de grupos de ultraderecha y marchas antifascistas el próximo sábado, con motivo de la conmemoración del 20-N.
La CEP señaló que si no existe “un refuerzo policial real”, la policía “no tendrá responsabilidad alguna” en nuevos altercados. Este sindicato pidió también que se prohíba la marcha que ha convocado en la capital el partido de ultraderecha Alianza Nacional.
Tras la muerte de un menor a manos de un militante de extrema derecha, el debate ha ido más allá de la autorización o no de estas manifestaciones de grupos neonazis. Gaspar Llamazares (IU) abogó por abrir la discusión sobre la ilegalización de estos grupos e ironizó con que la ley de partidos debería aplicarse no solo a los que no condenan la violencia, sino a los que “la promueven”. Eduardo Zaplana (PP) abogó por ilegalizar a los partidos que “no respeten el sistema democrático y de convivencia”. La delegada del Gobierno en Madrid, Soledad Mestre, afirmó que el fiscal se equivocó al defender la autorización de una manifestación de Falange el sábado.
Josué E. de la H., el soldado detenido como presunto autor del apuñalamiento del menor fallecido en la reyerta de Legazpi, pasó a disposición judicial ayer.