ITALIA El padre y dos cuñados de Hani Saleem, la joven pakistaní que murió degollada el 11 de agosto del 2006, han sido condenados por un tribunal de Brescia a 30 años de prisión cada uno como autores del asesinato, con el agravante de ocultamiento del cadáver. Los hechos ocurrieron en Sarezzo, a 14 km de Brescia. En lugar de aceptar el matrimonio convenido por su familia, la joven había decidido irse a vivir con su novio, católico e italiano, por lo que sus familiares decidieron matarla y esconder su cadáver. En ningún momento del proceso, la familia mostró señales de arrepentimiento. / M. Villagrasa