La Falange mantiene para el próximo sábado su tradicional manifestación y posterior marcha hasta el Valle de Los Caídos en homenaje a José Antonio Primo de Rivera, «asesinado por los socialistas en 1936». Pese al intento de la Delegación de Gobierno de Madrid de prohibir la convocatoria por la agresión verbal «contra un sector de la población», los falangistas consideran que se trata de un acto pacífico. «En 50 años no ha pasado nada. Acuden personas coherentes y nada violentas y muchos son mayores. Si esta marcha tiene algo es romanticismo e historia».

Santiago Casero, portavoz de Falange, asegura que «somos un partido legalizado y tenemos derecho a manifestarnos como cualquiera». «No entendemos como la Delegación del Gobierno la quiso desautorizar. En la vista judicial que se celebró para decidir si se prohibía el fiscal no puso ninguna pega». «En estos días están pasando muchas cosas y La Falange no tiene nada que ver. Nosotros ni somos racistas ni xenófobos», añadió Casero.