Alberto Ruiz – Gallardón afirma que no permitirá que «la violencia y la intransigencia se instalen en la capital». Mientras, la FRAVM pide ilegalizar a todas las organizaciones racistas y Movimiento contra la Intolerancia anuncia que se personará en el caso Ni violencia ni intransigencia ni intolerancia». Tres palabras que el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz – Gallardón, repitió varias veces para negarlas una y otra vez. Al menos, en su ciudad, respecto de lo ocurrido el pasado domingo en la estación de Metro de Legazpi en la que murió un menor de 16 años.

«Declarar con toda la fuerza y la serenidad que no vamos a consentir que Madrid sea una ciudad en que se instale la violencia, la intransigencia y la intolerancia», aseguró el regidor después de solidarizarse con la familia del menor fallecido a manos de un joven de ideología nazi.

Ruiz – Gallardón aseguró que «no vamos a tener una mirada indiferente ante acontecimientos tan graves con resultados irrecuperables para sus víctimas» y volvió a repetir que «Madrid no va a consentir que estos escenarios de violencia formen parte del paisaje de esta ciudad pacífica y ejemplo de convivencia».

El regidor mostró su apoyo a las actuaciones de la Delegación de Gobierno y aseguró que será la justicia quien tiene que emprender las acciones oportunas en un Estado de Derecho. Para concluir, el alcalde sentenció que «en una mirada de futuro, no caben la violencia, la intransigencia ni ninguna conducta violenta».

Pero la de Ruiz – Gallardón no fue la única reacción en contra de la violencia que protagonizaron portavoces de instituciones madrileñas ayer, tras lo ocurrido en la estación de Legazpi.

Federación de Vecinos.

La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) pidió directamente la ilegalización de las organizaciones que alientan el odio racial y la xenofobia, así como la prohibición de las manifestaciones que promueven estos grupos, según informó Europa Press. Para esta organización, el asesinato de Carlos Palomino fue «consecuencia de la convocatoria de una manifestación de contenido racista y xenófobo en Usera». Los representantes de la Federación insisten en que «se trata de organizaciones perfectamente estructuradas que muchas veces, como el partido que promovió la manifestación, se encuentran registradas como entidades legales».

Defensor del Menor.

El Defensor del Menor, Arturo Canalda, mostró su preocupación por la vinculación de algunos menores con determinadas bandas organizadas y grupos extremistas de cualquier ideología y apeló a la responsabilidad de «todos» para evitar que comportamientos violentos calen entre los jóvenes. Para Canalda, algo se debe de estar haciendo «muy mal como sociedad para que cada vez calen más» en la juventud comportamientos violentos. El defensor indicó que, en los últimos tiempos, se han producido varios casos de agresiones entre menores grabadas en teléfonos móviles y difundidas después por internet, lo que, a su juicio, «es un indicio de que algo está ocurriendo con los menores».

Movimiento contra la Intolerancia.

Movimiento contra la Intolerancia se personará como acusación popular en la causa por el asesinato de Carlos Palomino. Su presidente, Esteban Ibarra, anunció a Europa Press que la representación legal de la asociación iba a presentar a lo largo de la tarde de ayer una querella criminal ante el Juzgado de Instrucción número 50 de Madrid para personarse en el procedimiento abierto contra Josué Estébanez de la Hija, el presunto autor del apuñalamiento.