El único radar del SIVE en Tenerife fue estrenado en 2006 y lleva meses averiado

El Día, FUMERO/MERINO, Tenerife, 10-11-2007

El radar del Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE), estación sensora móvil instalada en un camión que fue estrenado en 2006, está averiado desde hace meses y se encuentra aparcado en la Comisaría de la Guardia Civil de Las Américas, en el Sur de Tenerife. Costó 1.174.000 euros y apenas ha sido amortizado.

El único radar del SIVE (Sistema Integral de Vigilancia Exterior) que existe en Tenerife, una estación sensora móvil instalada en un camión, estrenado el pasado año, está averiado desde hace meses y se encuentra aparcado en el cuartel principal de la Guardia Civil de Playa de Las Américas.

Esto explica que los cayucos que se acercan a Tenerife lleguen sin ser vistos y no sean detectados. Este radar móvil tuvo un coste de 1.174.000 euros y apenas ha sido amortizado.

Este radar fue anunciado por la Delegación del Gobierno en febrero de 2006, elogiando el compromiso del Ejecutivo central para afrontar el fenómeno de la inmigración clandestina en Tenerife, diciendo que iba a estar operativo durante las 24 horas del día, con varias misiones, entre las que figuraba el tráfico de estupefacientes por mar.

Fuentes cercanas al operativo de vigilancia señalaron que, en realidad, este sistema móvil no sirve en Tenerife, debido a la orografía del terreno. Explicaron que para ser eficaz debería ubicarse en un lugar alto, en una montaña, porque, de lo contrario, la estación sensora no puede ejercer su función.

A pesar de que unos cuantos guardias recibieron preparación para utilizar este novedoso sistema, no ofrece buenos resultados.

Lo más adecuado sería la instalación que existe en Fuerteventura, donde los radares del SIVE están situados en los faros de la Isla, el punto más adecuado para que los sensores detecten el movimiento en el agua por el calor que desprenden tanto las personas, como, sobre todo, el motor de la embarcación.

No en vano, para probar si funcionaba bien, el camión con el radar móvil subió a un monte de El Suculum, en San Andrés, para participar en un simulacro de la detección de un cayuco en el mar.

El radar móvil detecta los objetos que flotan en el agua, a través de unas cámaras de largo alcance, lo que permite, en el caso de los cayucos o las pateras, que los servicios de rescate puedan acudir en auxilio de los inmigrantes.

El gran obstáculo es que si está en una zona baja no puede desempeñar su misión.

La estación sensora móvil se ha averiado. Se trata de un sistema muy complejo, a base de un radar, un transceptor, una antena, otro radar optrópico, que se puede definir como un laboratorio de imagen y sonido montado sobre un camión de tracción 4×4, con 240 caballos y un peso total de 14 toneladas, según explicó un experto.

En abril de 2006, el Ministerio del Interior anunció el envío de otro radar móvil a Tenerife, para completar el SIVE en el Archipiélago. Cabe recordar que Interior realizó este anuncio en el Senado en respuesta a una pregunta del senador de CC por Tenerife Ricardo Melchior. En ese momento, recordó que el SIVE contaba en 2006 con una dotación de casi 23,8 millones de euros (un 46,19 % más que el año anterior), con el fin de controlar la inmigración irregular, para actuar rápidamente ante situaciones de emergencia salvando vidas humanas.

Como ya se había instalado en Fuerteventura, Lanzarote y Gran Canaria, sólo quedaba Tenerife, que, en 2006, era la isla que recibía un mayor número de cayucos.

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