La pelea a navajazos que el sábado por la noche se saldó con tres heridos graves en la calle de Balmes tuvo un precedente dos semanas antes cuando uno de los agresores flirteó con la novia de una de las víctimas, en una discoteca de salsa de Heron City. Aquel encontronazo no pasó de las palabras. El sábado por la tarde, los tres protagonistas se reencontraron por casualidad en una sala de baile latina del Eixample y los reproches no tardaron en aflorar. Ya en la calle, de los insultos se pasaron a los golpes, y después a los navajazos.
Seguramente fue la estética de los jóvenes que se peleaban la que despistó a algunos testigos que en las primeras horas hablaron de una pelea entre bandas latinas. Nada más lejos de la realidad. Entre las víctimas hay ecuatorianos y dominicanos, mientras que los dos o tres agresores descritos serían ecuatorianos. Ninguno pertenece a banda alguna.
La pelea ha provocado una lógica preocupación entre los responsables de los Mossos d&39;Esquadra y de la Guardia Urbana, que precisamente hace dos semanas organizaron en ese mismo tramo de la calle de Balmes un macrocontrol policial bautizado como operación Trident.

UN PUNTO DE OCIO DISPAR
La elección de la calle para organizar el dispositivo policial no fue casual. Los diferentes responsables policiales consultados niegan que ese tramo de Balmes sea conflictivo, pero sí reconocen que hay una gran y dispar concentración de locales de ocio que moviliza a muchos jóvenes y que, en ocasiones como el sábado por la noche, estos pueden protagonizar altercados. Estos mandos sí asumen estar preocupados por la costumbre arraigada en algunas comunidades, como la latina, de salir de fiesta con un arma blanca en el bolsillo.
De aquí que en la operación Trident, además del control de alcohol y estupefacientes, se buscaran y se incautaran armas blancas. En este mismo contexto se entienden otras actuaciones de la comisaría de los Mossos d&39;Esquadra del Eixample de los últimos meses que, con el apoyo de la ARRO (unidades especiales de seguridad ciudadana), han realizado inspecciones por sorpresa a las discotecas y after hours más polémicos de la zona. En algunas, además de las incautaciones de droga, se han intervenido armas blancas.
Tras la pelea del sábado, por la que tres jóvenes permanecen hospitalizados con pronóstico grave aunque no se teme por la vida de ninguno, la intención de los responsables tanto de los Mossos d&39;Esquadra como de la Guardia Urbana es incrementar la presencia uniformada en la zona y encontrar la manera de hacer operaciones dirigidas a sacar de la circulación armas blancas por la noche. Una acción que no se descarta hacer en colaboración con los responsables de los locales de ocio.