La menor ecuatoriana agredida explica su versión de los hechos

"Él no iba borracho"

La Vanguardia, , 25-10-2007

- BARCELONA. Redacción

“Mamá, tienes que hacer todo para que actos como éste no ocurran jamás”, dijo la menor a su madre
No quiere dar su nombre ni quiso comparecer ayer en la rueda de prensa que dio la ministra de Exteriores de Ecuador. Únicamente la popular emisora colombiana Radio Caracol recogió unas breves palabras de la chica ecuatoriana de 16 años que el pasado 7 de octubre fue agredida en un tren de los Ferrocarrils de la Generalitat. “Él no estaba borracho en ningún momento”, declara la joven, pero también aclara que aún ignora las causas de la agresión puesto que no sólo no se conocían, sino que ni siquiera se dirigieron la mirada.

“No me explico – declaró la chica a Radio Caracol en la noche del martes al miércoles- por qué reaccionó de esa manera. Él se subió al tren y venía hablando por teléfono, me vio que estaba sola y empezó a descargar su rabia y se ve que es un racista”. En la entrevista también dice sentir miedo porque el agresor está libre. A la pregunta de por qué no se defendió, la chica asegura: “En este momento estaba muy nerviosa, oía insultos y amenazas y aún sigo nerviosa. No quiero recordar nada de eso”. De todos modos, sí recuerda que el joven destacó varias veces su condición de inmigrante. En cuanto al otro pasajero que iba en el mismo vagón, testigo de todo y supuestamente de nacionalidad argentina, “lo único que me dijo es que llamara a la policía”, señala.

La afectada, que asegura que aún le duelen la cabeza y el pecho, asegura: " (Recordar la agresión) me pone mal a mí y a mi mamá, pero sobre todo a mi hermana", en referencia a una hermana mayor que está embarazada. Las tres viven desde hace tres años en Barcelona, mientras el padre reside en Guayaquil.

Radio Caracol también habló con la madre, Alexia Mora Alvarado. “Me ha tocado luchar mucho para llegar hasta donde estoy, pero gracias a Dios y a esta oportunidad hoy puedo decir que tenemos un mejor porvenir”, dijo. La mujer se declaró sorprendida por recibir una llamada de apoyo del propio presidente ecuatoriano, Rafael Correa. La madre también declaró a Radio Quito que no regresaría a Ecuador, pese a las ofertas del Gobierno. La mujer reconoció la añoranza de su país, pero recalcó: “Tengo aquí mi vida, tengo aquí, sobre todo, mi trabajo, no voy a volver, no voy a dar un paso atrás”.

Durante la entrevista, la mujer se manifestó “muy nerviosa” y reconoció que su hija se encuentra en tratamiento psicológico desde que sufrió la agresión hace 16 días. Para ella, la agresión a su hija “ha sido racismo, no puede ser otra cosa”, e insistió en pedir discreción para su hija y su familia, pues consideró que la situación “se ha alborotado demasiado”.

La ministra ecuatoriana María Fernanda Espinosa destacó la actitud valiente de la madre, pidió discreción a los medios y sólo divulgó el comentario que le hizo su hija: “Mamá, tienes que hacer todo para que actos como éste no ocurran jamás”.

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