| EFE

El presidente Rafael Correa deploró este sábado la nueva orden de expulsión de Bélgica contra las ecuatorianas Angélica Loja, de doce años, y su madre Ana, y criticó la supuesta “doble moral” de Europa frente a América Latina.

“Parece que van a expulsar a la pequeña Angélica, la niña ecuatoriana que estuvo presa más de 30 días con su madre, Ana Cajamarca, en una cárcel en Bélgica”, por permanecer de forma irregular en ese país europeo, informó Correa en su habitual programa radial sabatino.

El jefe del Estado ecuatoriano se preguntó “¿qué pasaría si un presidente latinoamericano (…), incluso si así lo estableciera la ley, mantuviera presa a una madre europea y a su hija de doce años?”.

Si ello ocurriera, para los europeos “seríamos los cavernícolas, dictadores, totalitarios, abusivos, incivilizados, pero eso es lo que está haciendo Europa” con las dos ecuatorianas, remarcó Correa.

“En una muestra de soberbia del gobierno belga, van a expulsar a Angélica y a su madre Ana…. Vuelvan compañeras, no se preocupen, aquí los recibiremos con los brazos abiertos y vuelvan todos los emigrantes ecuatorianos”, subrayó el mandatario.

Sobre los inmigrantes latinoamericanos Correa señaló que no tienen porqué “aceptar tanta humillación, tanto desprecio” y discriminación.

Además, dijo que el anuncio sobre la orden de expulsión contra las ecuatorianas se da un día después de la conmemoración de la fecha en la que se recuerda el descubrimiento de América.

“No hubo tal descubrimiento, fue la invasión de Europa a lo que ahora conocemos como América. Aquí había civilizaciones estructuradas con grandes conocimientos, con grandes redes sociales” y esa civilización fue “dominada por el asalto europeo”, recriminó.

“Siempre América ha tenido los brazos abiertos para los extranjeros. ¡Cómo sacaron la plata de Potosí (Bolivia), el oro de América Latina para crear la riqueza de Europa!”, añadió Correa, al recordar las circunstancias de la conquista.

El mandatario también hizo alusión a la globalización y dijo: “¿cómo se pude tener ética en una globalización que permite mover mercancías (…), pero que impide moverse a las personas por cualquier parte del mundo para encontrar un trabajo digno?”.

Correa afirmó que esa actitud es una “doble moral, es hipocresía”.

“Si algún día (los habitantes de) Bélgica o Europa tienen que abandonar esas tierras y tienen que venir acá, los recibiremos con los brazos abiertos, porque en Ecuador y América Latina no existen seres humanos ilegales, existen solo seres humanos, una sociedad humana, una sola raza: la raza humana”, apostilló el gobernante.