La activista mexicana Elvira Arellano, símbolo de la lucha por los derechos de los inmigrantes hispanos en EU, participó ayer en la salida de una simbólica carrera de relevos que cada año lleva la denominada Antorcha Guadalupana desde el Distrito Federal hasta Nueva York.

En la Basílica de Guadalupe, Arellano envió un mensaje de esperanza a aquellos que buscan regular su situación ilegal en Estados Unidos, como intentó ella de forma infructuosa durante meses.

Según Arellano, que ayer por la mañana fue uno de los primeros relevos de la quinta Edición de la Carrera Antorcha Guadalupana México – Nueva York, la solidaridad con ellos es necesaria que nunca después de todas las redadas, deportaciones y separación de familias que están sucediendo en Estados Unidos.

A las seis de la mañana se encendió la antorcha, que miles de corredores, principalmente familiares de indocumentados, llevarán por 67 días hasta la catedral de San Patricio, en Nueva York, en un trayecto de 5 mil kilómetros. (Con información de EFE)

La activista mexicana Elvira Arellano, símbolo de la lucha por los derechos de los inmigrantes hispanos en EU, participó ayer en la salida de una simbólica carrera de relevos que cada año lleva la denominada Antorcha Guadalupana desde el Distrito Federal hasta Nueva York.

En la Basílica de Guadalupe, Arellano envió un mensaje de esperanza a aquellos que buscan regular su situación ilegal en Estados Unidos, como intentó ella de forma infructuosa durante meses.

Según Arellano, que ayer por la mañana fue uno de los primeros relevos de la quinta Edición de la Carrera Antorcha Guadalupana México – Nueva York, la solidaridad con ellos es necesaria que nunca después de todas las redadas, deportaciones y separación de familias que están sucediendo en Estados Unidos.

A las seis de la mañana se encendió la antorcha, que miles de corredores, principalmente familiares de indocumentados, llevarán por 67 días hasta la catedral de San Patricio, en Nueva York, en un trayecto de 5 mil kilómetros. (Con información de EFE)