Donostia. El centro de menores de Tolosa ha puesto en marcha un programa pionero de mediación intercultural que, según avanzó ayer el gerente de Hogares Nuevo Futuro, Iñigo Ruiz, “comienza a arrojar buenos resultados”.

Un grupo de trabajadores del centro de acogida de menores de Tolosa denunció a este periódico la semana pasada la “falta de seguridad” que viven los empleados y algunos de los acogidos de la casa Sevendenea, donde habitualmente se da cabida a una veintena de menores inmigrantes.

El gerente de este centro admitió ayer que, a pesar de los esfuerzos que está llevando a cabo la institución foral, el “burnout”, también llamado síndrome de “estar quemado” o de desgaste profesional, está muy instalado en el centro de Tolosa, si bien se mostró esperanzado con los resultados del programa que han emprendido. “¿Por qué nos quemamos? Hay muchas situaciones de conflicto y emocionales que es conveniente analizar para tomar la medidas preventivas necesarias”, planteó Ruiz.