La Guardia Civil mejorará el rescate de inmigrantes con el buque "Río Miño"

La Guardia Civil dispone desde ayer en Canarias de una nueva embarcación para vigilar los cayucos con mejores condiciones para rescatar a inmigrantes, según manifestó el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, en la entrega del buque, que puede acoger a 150 personas además de a la tripulación.

El Día, DORY MERINO, Tenerife, 01-09-2007

La Guardia Civil cuenta desde ayer en Canarias con una nueva embarcación para vigilar los cayucos, con mejores condiciones para rescatar a inmigrantes, tal y como manifestó ayer el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, en la presentación que hizo de este buque en la Base Naval de Las Palmas.

La “Río Miño” es la primera patrullera de la Guardia Civil de más de 30 metros de eslora, que mide 52 metros y tiene autonomía para 22.000 millas, lo que le permitirá vigilar y rescatar inmigrantes más allá de las fronteras españolas. Camacho precisó que es adecuada para realizar rescates de inmigrantes en el mar, porque tiene capacidad para acoger a unas 150 personas, además de la tripulación.

Antonio Camacho acudió ayer a Canarias en lugar de Alfredo Pérez Rubalcaba, como estaba anunciado, quien suspendió el viaje previsto al Archipiélago para seguir desde Madrid la operación contra ETA.

Según Camacho, “la nueva patrullera cubre un hueco importante en los medios de la Guardia Civil y servirá para detectar barcos negreros”.

Camacho rechazó las críticas vertidas por el Sindicato Unificado de la Guardia Civil referentes a la lentitud del nuevo barco o al personal que lo integra, pues aseguró que basta ver la embarcación para comprobar que se trata de una estrategia sindical que no responde a la realidad. Además, explicó que ha sido elegida por expertos.

Camacho garantizó, por otra parte, que la actuación de la Guardia Civil en aguas internacionales no plantea dudas jurídicas ni el hecho de que una parte “pequeña” del personal de la patrullera, por una cuestión legal, no pertenezca a la Guardia Civil, cuyos agentes, en cualquier caso, serán los que realicen las operaciones.

Indicó que la nueva embarcación de la Guardia Civil es un pesquero que reunía las condiciones necesarias para ser adaptado a una nueva función y tiene capacidad para 225.000 litros de combustible y 19.000 de agua más dos depuradoras capaces de generar 3.000 litros de agua diarios cada una.

Matizó que su velocidad es de 12 nudos, aunque cuenta con embarcaciones rápidas para intervenciones en alta mar, y su autonomía alcanza los 85 días.

La última tecnología en comunicaciones y vigilancia, así como diversidad de áreas y servicios para más de 30 tripulantes y sala de náufragos, son algunas de sus dotaciones, entre las que destaca un sistema de extinción de incendio automático.

Sus funciones serán el control de la inmigración ilegal, la vigilancia marítima, el salvamento de personas, actuaciones humanitarias y la lucha contra la contaminación.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)