Los taxistas de Murcia también sufren, como denunciaban ayer sus colegas de Cartagena, la competencia de grupos de magrebíes que actúan como auténticos taxistas piratas quitándoles clientes en la estación de autobuses de San Andrés a cambio de cobrarles la carrera un poco más barata.

Rafa, taxista de Murcia, explica a La Verdad el modus operandi: El dueño de la furgoneta se acerca al taxista en la puerta de la estación de autobuses y le pregunta cuándo cobra por una carrera a Cartagena, por ejemplo. Una vez que sabe el precio – en torno a 58 euros, si es domingo y 50 euros si es un día de semana – , hace cómo que van a recoger las maletas y les ofrece mejor precio a sus paisanos para llevarlos. «Cómo hablan en su idioma no entiendes lo que dicen».

Los taxistas saben hasta en qué calle dejan las furgonetas – en la calle Bolos – . «Nosotros los sabemos desde hace tiempo», explica Pepe, otro taxista, pero no lo podemos demostrar y la policía tampoco porque si te acercas y les dices algo, te salen diciendo que es un familiar que ha ido a recogerlos».

Esta picaresca, según los taxistas se produce sobre todo en la puerta de la estación de autobuses de San Andrés, y el destino suele ser Cartagena, Lorca, Águilas, Torre Pacheco… o cualquier otro punto del municipio.

Jose Antonio, otro taxista, asegura que la competencia ilegal no sólo les ocurre con los magrebíes, sino también con los ecuatorianos, los rusos, los ucranianos…

Todos ellos coinciden en que necesitarían más colaboración por parte del Ayuntamiento o de la Policía Local para evitar que se sigan produciendo esos casos. «Nos quitan trabajo y esas carreras, de 50 ó 55 euros nos vienen bien», añaden.

El presidente de la cooperativa del Radiotaxi, José Corbalán, asegura que el problema de es ya endémico. «La Policía de vez en cuando se da una vuelta, pero cuando se baja la guardia se vuelve a utilizar el mismo sistema». Corbalán añade que «sabemos de la dificultad para combatir esta práctica». Indica que «más que del Ayuntamiento, la competencia es del área de Inspección de la Dirección General de Transportes de la Comunidad Autónoma, pero tendrían que tener más recursos para que la inspección estuviera más encima y evitara esa práctica».

Corbalán llama la atención sobre los peligros de coger uno de estos taxis piratas, «que son vehículos en mal estado, que no reúnen la mínima calidad, y además el seguro de los vehículos no está adaptado a ese tipo de servicio, por lo que si ocurriera un accidente estarían descubiertos». Corbalán añade que «ningún español se sube a este tipo de transporte porque sabe que no le garantiza un buen servicio». En cuanto a si lo han puesto en conocimiento el nuevo concejal de Transporte, Antonio Castillo, indica que «todavía no porque él lleva poco tiempo y a la hora de hablar con él teníamos otro orden de prioridades».