Según el presidente extremeño, esta medida se aplica con el objetivo de conciliar la vida laboral y familiar y ganar población. «Extremadura necesita que seamos más, el objetivo prioritario es el de ganar población en los próximos años en la región y conseguir que la media de hijos por familia se sitúe en dos. Aquí entra un plan sociolaboral de inmigración, un Plan de Retorno de Inmigrantes y un Plan de Ayudas a las Familias», explicó.
Para Fernández Vara, esta medida supondrá un gasto económico de unos 30 millones de euros, ya que nacen unos 10.000 niños al año en Extremadura, de los que la mitad son primeros hijos y el resto son los que recibirían estas ayudas.
Lo que falta por decidir es si «se tendrían en cuenta las rentas familiares o serán de aplicación general a todas las familias».
Además de las anteriores ayudas, el presidente autonómico ya tiene previstas otras, tal y como anunció en su discurso de investidura el pasado mes de junio: la gratuidad de los medicamentos para el primer año de vida del segundo bebé o una red de guarderías y servicios de atención a los niños en edad escolar para ampliar los horarios de comedores escolares y contar con más cuidadores en los centros.
En definitiva, y según lo que el mismo Fernández Vara anunció en su toma de posesión, se pretende que la puesta en marcha de estas medidas sea a partir del 1 de enero del próximo año 2008.