VALENCIA | SOCIEDAD

El campamento desaparece del cauce

El Ayuntamiento erradica los asentamientos de inmigrantes en apenas una semana

Las Provincias, PACO MORENO, 22-07-2007

El Ayuntamiento erradica los asentamientos de inmigrantes en apenas una semana La semana que concluye ha acabado también con una estampa a la que se habían acostumbrado estos años muchos vecinos de Valencia. En apenas unos días, las obras de un estanque y la oferta masiva de albergues y hostales ha conseguido acabar con el campamento de inmigrantes que se extendía debajo del puente de las Glorias Valencianas.

El lunes a primera hora, una veintena de técnicos de Servicios Sociales, acompañados por decenas de agentes de la Policía Local y la insólita presencia de un notario, llegaron a este tramo del viejo cauce con el firme propósito de forzar el traslado de un centenar escaso de inmigrantes fuera del jardín.

De una manera “honrada y transparente” según la alcaldesa Rita Barberá y con precipitación y sin contar con ellos, a tenor de las críticas de algunas ONG, en sólo tres días había desaparecido cualquier rastro de un campamento que parecía crónico, tan acostumbrados estaban todos los viandantes del cauce a contemplar los colchones, cartones, hornillos y cualquier mobiliario que hiciera menos incómoda la estancia a sus “inquilinos”.

El traslado a albergues y hostales no ha estado exento de polémica. La concejala de Servicios Sociales, Marta Torrado, denunció el primer día que una veintena de inmigrantes se bajaron de la furgoneta tras ser convencidos por el voluntario de una ONG. Además, también hubo confusión en las primeras horas por el tiempo de estancia. La delegada dijo tajante que cada caso sería “único” por lo que podrá renovarse el plazo máximo de acogida en un albergue de la ciudad.

En lugar del campamento, aparecieron dos excavadoras que empezaron a romper el pavimento, con el propósito de ampliar el estanque. Las obras durarán todo el verano y los primeros días, agentes de la Policía Local vigilaban de cerca estos trabajos, para prevenir cualquier incidente contra los operarios.

El caso es que no se produjo nada parecido, excepto la sentada de un grupo de voluntarios el primer día. Acerca de la decisión de la alcaldesa, el silencio de algunos sectores indica claramente el apoyo que ha recibido. La Federación de Vecinos no ha querido opinar, al entender que el Ayuntamiento tenía entre manos una “patata caliente” que se le podía escapar a corto plazo.

El campamento de inmigrantes ha vivido estos años distintas altas y bajas, aunque ahora se había convertido en un lugar de reunión, fiestas y hasta incluido en la campaña electoral por parte de algún partido político. Es decir, un símbolo de oposición al gobierno municipal.

En su mayor parte, los inmigrantes que dormían en el cauce se dedican a trabajar en el campo como temporeros. Los lugares de concentración suelen ser en Valencia la estación de autobuses y la plaza Manuel Sanchis Guarner, a una hora muy temprana.

Por esa razón, uno de los motivos para rechazar los albergues son los horarios que rigen en estas instalaciones. Torrado tuvo que salir diciendo que los horarios serían muy flexibles para eliminar también ese último obstáculo.

La incógnita será conocer a partir de ahora si la red de albergues puede con los inquilinos del cauce. La asociación de vecinos de Nou Moles alertó hace días que algunos dormían en una pasarela peatonal en la avenida del Cid, aunque de momento no hay constatación de nuevos asentamientos.

Mientras, las ONG seguirán con la reclamación de un centro de acogida, para el que el Consistorio ya ha pedido al Gobierno que se comprometa y asuma la inversión.

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