Mamadou Keinde ya es un ciudadano legal en España. La subdelegada del Gobierno, Encarna Llinares, estampó ayer su firma en la orden que decreta la regularización del inmigrante senegales que, a comienzos del pasado mes de junio, salvó de morir ahogado a un jubiladoen una playa de Guardamar del Segura.

La rúbrica de la autoridad gubernativa supone hacer realidad el sueño de este subsahariano de 34 años de edad, casado y con tres hijos, que en el 2006 decidió emigrar a España con la esperanza de buscar ingresos suficientes para garantizar la subsistencia de su familia en el país africano. Nunca hubiera imaginado que sólo un año más tarde un gesto humanitario de primer orden le iba a reportar los permisos de residencia y trabajo.

«Hoy es un día de inmensa felicidad, sólo comparable a los de mi boda, al nacimiento de mi hija, a la que puse el nombre de mi madre, ya fallecida, y, precisamente, al del rescate en la playa, porque una persona pudo salvar la vida», razonó ayer Mamadou. Para el senegalés, el cambio que va a experimentar su vida se resume del siguiente modo: «Hasta ahora, cuando me levantaba no sabía cómo me iba a ganar la vida y si sería parado por la Policía; ahora sé que tendré un trabajo estable y que mi familia estará bien atendida».

Mamadou acudió ayer a la Subdelegación del Gobierno para recoger una copia del expediente firmado por Encarna Llinares, si bien el documento completo lo recibirá en los próximos días. De la misma manera, ya ha sido remitido a la empresa de Elche, Elxplant, que, nada más conocer la el gesto de generosidad del inmigrante, le hizo llegar una propuesta de contrato laboral para emplearlo en un vivero.

La autorización de residencia, acompañada de la de trabajo, se argumenta en circunstancias excepcionales, por lo que hay que dejar claro que esta regularización responde a un hecho muy concreto e individualizado. Así consta en el expediente, que sigue los mismos parámetros del que hace un año significó también la legalización de Alassane Sy, Alou, que el verano del 2006 se hizo célebre en toda España por auxiliar a una niña atacada por un pez golfar en Alicante.