Mauritania frena las repatriaciones hasta que no se resuelva la crisis del 'Marine I'

El Mundo, 09-07-2007

Las autoridades del país africano están molestas porque después de cinco meses todavía queden 23 inmigrantes en el puerto de Nuadibú El Gobierno de Mauritania ha frenado en seco las repatriaciones de inmigrantes a su país hasta que no se resuelva la crisis del buque Marine I. El Ejecutivo español se comprometió a solucionar en cuatro horas las deportaciones de los 369 asiáticos que viajaban a bordo del carguero rescatado por Salvamento Marítimo español.Pero lo cierto es que, casi cinco meses después, todavía 23 sin papeles permanecen en el puerto de Nuadibú, aunque 10 de ellos serán pronto trasladados a España. Esta situación ha provocado malestar entre las autoridades mauritanas, con las que el Ministerio de Asuntos Exteriores mantuvo arduas negociaciones para que aceptasen el desembarco de los inmigrantes, al que se negaban en un primer momento.En revancha, el Ejecutivo del país africano está poniendo cada vez más trabas a las deportaciones a su país. Hasta ahora, el Gobierno mauritano aceptaba las repatriaciones no sólo de sus compatriotas, sino también de los ciudadanos de Mali y Senegal. Pero desde que comenzó la crisis, apenas se han ejecutado expulsiones a Mauritania, según informaron a este diario fuentes policiales.Uno de los escasos vuelos fue el que trasladó, a mediados de mayo, a los 57 subsaharianos que atacaron con cócteles molotov a la patrullera de la Guardia Civil Río Duero, en aguas mauritanas, para evitar ser interceptados y lograr llegar a Canarias.El viaje de vuelta de los sin papeles – que se realizó en un avión fletado por el Ministerio del Interior a Air Europa – fue un tanto accidentado y hubo complicaciones en el aterrizaje, según denunció la Confederación Española de Policía (CEP).Este sindicato relata que el Ministerio de Exteriores alertó al de Interior de que el aeropuerto de Nuadibú se encontraba en obras y que la pista de aterrizaje contaba con 1.000 metros menos de longitud. De hecho, la compañía aérea Air Mauritania suspendió temporalmente la línea Las Palmas – Nuadibú, debido a los trabajos existentes en el aeródromo.Sin embargo, a pesar de las advertencias de Exteriores y del Ejecutivo mauritano, Interior decidió seguir adelante con el vuelo, en el que viajaban más de 100 personas entre inmigrantes y policías. «La Comisaría General de Extranjería estaba avisada de que era peligroso que un avión tan grande aterrizase en esas condiciones, pero no suspendió el vuelo», manifestó el secretario de Organización de la CEP, Lorenzo Nebreda.Según el testimonio de los policías, el aterrizaje fue muy ajustado y se produjo un fuerte barrigazo, lo que provocó que el piloto del avión montase en cólera y protestase por la situación. «Están jugando con la vida de los inmigrantes y de los policías. Fue un aterrizaje escandaloso», añadió Nebreda. Tanto el sindicato de pilotos (Sepla) como los de la policía llevan tiempo denunciando la falta de seguridad en los vuelos de repatriación organizados por Interior.El colectivo de pilotos de Air Europa ha mostrado su preocupación, ya que considera que existe «riesgo evidente para la vida de los ciudadanos deportados en los vuelos que esta compañía tiene contratados con Interior, en caso de eventuales emergencias».El último episodio en un viaje de repatriados se vivió el pasado 9 de junio, cuando un ciudadano nigeriano falleció bajo custodia policial en el avión de Iberia que le deportaba.Mientras tanto, los últimos 23 inmigrantes del Marine I que se negaron a ser identificados en un primer momento, continúan retenidos en un centro de acogida de Nuadibú (Mauritania) casi cinco meses después del desembarco.El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ha vuelto a revisar sus casos y 10 de ellos serán acogidos finalmente por España. Cinco de los pasajeros del buque están en condiciones de pedir asilo político y los otros cuatro serán enviados a nuestro país para ser sometidos a un tratamiento médico.@FIRMA:ANA DEL BARRIO

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)