madrid. La población española es más joven que en 2004, según el informe Las personas mayores 2006, presentado ayer por la secretaria de Estado de Asuntos Sociales, Amparo Valcarce. En España viven 7,3 millones de personas mayores, el 16,3% de la población, tres décimas menos que en 2004. Valcarce calificó de “muy positivo” este leve rejuvenecimiento social, debido a la población inmigrante y al repunte de la tasa de natalidad, y afirmó que prueba que España es un país europeo “avanzado”, cuyas cifras de población mayor son similares a las de Italia (17,2%), Francia (16,3%), Alemania (16,4%) o Reino Unido (15,9%). La ONU, no obstante, sitúa a España como el tercer país más envejecido del planeta en 2050, tras Japón e Italia, – un puesto por debajo de lo anunciado hasta ahora – .

Otro de los datos que se desprende del informe, y que la secretaria de Estado consideró importante es que más de la mitad de la población mayor son mujeres, con un 58%. Asimismo, destacó el crecimiento de la población octogenaria en los últimos 15 años y concretamente un 66% frente al 13% de la población total. Este último dato significa que cerca de dos millones de personas en España superan los 80 años y, según palabras de Valcarce, supone el “envejecimiento del envejecimiento”. Así, la esperanza de vida o vida media, alcanza ya los 79,9 años; 76,3 para los varones y 83 para las mujeres.

Los mayores de 80 años se han convertido en el grupo de población de mayor crecimiento en el mundo, hasta el punto de que su número alcanzará 400 millones en 2050, cuatro veces más que en la actualidad, según la Encuesta Social y Económica Mundial 2007 , presentada también ayer por la ONU.

En la actualidad, existen unos 90 millones de personas mayores de 80 años, el 1,5% de la población, pero se espera que en el año 2050, dentro de cuatro décadas, este número se haya multiplicado hasta alcanzar los 400 millones de personas. En general, los mayores de 60 años superarán los 1.000 millones, frente a los 670 millones que hay en la actualidad.

Los factores que originan este fenómeno son muy conocidos, como es el descenso de la fertilidad y la mejora de las condiciones de vida, sanidad y salubridad, que han elevado espectacularmente la esperanza de vida.

Uno de los factores más importantes para contar con un sistema de pensiones viable, señala el informe de la ONU, es lograr mantener o mejorar la productividad económica, lo que en muchos casos implica incorporar a las mujeres y a los trabajadores de mayor edad. Considera, no obstante, que la inmigración no es una solución al envejecimiento de los países desarrollados, porque es muy “poco probable” que algún país admita la llegada masiva de trabajadores en número suficiente para cubrir la descompensación entre jóvenes y mayores, 13 millones en el caso de la UE. >agencias