Un total de 80 extranjeros presentaron una demanda de asilo el año pasado en el País Vasco, de los que 78 fueron atendidos por la Comisión de Ayuda al Refugiado en Euskadi (CEAR – Euskadi). Según esta ONG, el Ministerio de Interior reconoció el estatuto de asilado en el País Vasco a cuatro de sus demandantes – tres varones de Colombia, Cuba y Rusia y una mujer de origen cubano – . Otros cinco solicitantes obtuvieron el estatuto de protección por motivos humanitarios – cuatro varones de Costa de Marfil y una mujer de Nigeria – .

El presidente de CEAR – Euskadi, Javier Galparsoro, indicó que Vizcaya acaparó la mayoría de las demandas en la comunidad vasca (76), mientras que Álava registró tres casos y Guipúzcoa, uno. Las cifras son muy reducidas si se tiene en cuenta que, en el conjunto de España, se formularon 4.515 solicitudes de asilo, de las que sólo concluyeron de forma positiva 356 (168 con estatuto de refugiado y 188 con el de pro – tección humanitaria).

«Situación de crisis»

Según Galparsoro, que presentó ayer el informe anual de CEAR sobre la situación de los refugiados, el derecho de asilo atraviesa «una auténtica situación de crisis» en la Unión Europea, pues el número de solicitudes se redujo a la mitad entre 2000 y 2005.

Con ocasión del Día Mundial del Refugiado, el responsable de CEAR – Euskadi recordó que, una vez que una petición de asilo se admite a trámite, el rechazo puede llegar en año y medio, un periodo durante el cual el demandante ha permanecido en situación regular. «Queda en una situación de absoluta vulnerabilidad, ya que la denegación conlleva una orden de salida obligatoria del territorio nacional», señaló Galparsoro.