Detenido el director de una caja por estafar a inmigrantes con las hipotecas

El País, NATÀLIA IGLESIAS, 20-06-2007

Los Mossos d’Esquadra han detenido al director de una sucursal de Caja Madrid en Girona y a dos administradores de una asesoría por estafar supuestamente al menos a una decena de inmigrantes con créditos hipotecarios. Los detenidos, Ascensión S. B., Xavier P. R. y Marc C. S., cobraban a las víctimas comisiones ilegales de entre 20.000 y 40.000 euros a la hora de formalizar una hipoteca.

Si los inmigrantes se negaban o se mostraban en desacuerdo con la comisión, los estafadores les amenazaban con retirarles el crédito. La estafa, que puede haber afectado a una cincuentena de personas, seguía siempre el mismo patrón. Los afectados, en su mayoría magrebíes y subsaharianos instalados en Salt (Gironès) y Banyoles (El Pla de l’Estany) se dirigían a una agencia inmobiliaria de Salt para comprar piso. Ante la dificultad de obtener un crédito, desde esta oficina les ponían en contacto con una asesoría que se dedicaba a buscar el banco para la hipoteca.

La sucursal de la entidad bancaria Caja Madrid situada en la calle de Emili Grahit de Girona, de manos de su director y sin conocimiento previo ni consentimiento por parte de los clientes, concedía las hipotecas por el precio de la vivienda más un cargo adicional de entre 20.000 y 40.000 euros. Esta cantidad es la comisión que los detenidos cobraban a través de un reintegro, que la víctima firmaba bajo presiones y sin llegar a entender por qué el piso que pretendían comprar subía de precio repentinamente. En alguna ocasión, los detenidos habían llegado a ofrecer trabajo a las víctimas para evitar que los denunciasen.

En uno de los casos, los detenidos tramitaron la hipoteca poniendo como avalistas a otros inmigrantes sin ningún vínculo con los clientes y también con pocos recursos, a cambio de unos 600 euros.

La mayoría de clientes estafados tenían dificultades con el idioma y escasos conocimientos sobre sus derechos, además de una precaria situación económica.

Una vez ingresado el dinero, el director lo retiraba en metálico y lo repartía con los dos asesores implicados en el caso.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)