Raja Zulqarnain Khan, presidente del Gobierno autónomo de Azad Jammu y Cachemira, tutelado por Pakistán, efectuó un viaje relámpago a Barcelona para reunirse con la comunidad paquistaní de Cataluña, a la que pidió que se integrara en el país de acogida, aprendiera la lengua y pagara sus impuestos.

Más de 300 inmigrantes paquistaníes se reunieron el domingo por la tarde en el salón de actos del sindicato Comisiones Obreras de Barcelona para escuchar el mensaje del presidente del Gobierno autónomo de Cachemira, Raja Zulqarnain Khan.

“He sido claro y tajante; les he pedido que se integren en el país de acogida. Tienen que aprender la lengua, pero respetar sus costumbres y pagar además sus impuestos”, asegura el presidente Zulqarnain, en la recta final de una visita que ha durado poco menos de 36 horas.

El presidente de Azad Jammu y Cachemira aprovechó también la ocasión para transmitir un sutil mensaje político, en el que pidió a sus conciudadanos que se mostraran unidos, defendieran al Gobierno del presidente Musharraf, eludiendo cualquier signo de discrepancia y confrontación interna.

“Vivimos un momento delicado. Las negociaciones directas entre Pakistán e India para cerrar el conflicto de Cachemira están prácticamente paradas. La comunidad internacional debe defender la celebración de un plebiscito de autodeterminación en Cachemira de acuerdo con la resolución de la ONU en 1948”, asegura el presidente Zulqarnain, firme defensor de la unificación de las dos Cachemiras bajo la tutela conjunta de Pakistán y de India.

Zulqarnain repitió hace pocos días este mismo mensaje político ante la comunidad paquistaní de Bruselas. Mañana insistirá otra vez en ello cuando se reúna con su comunidad en Londres, considerada la más influyente e importante de Europa.

La comunidad paquistaní de España está compuesta por cerca de 70.000 personas, de las que unas 45.000 viven en Cataluña. Sólo un 10% de la comunidad paquistaní está compuesta por inmigrantes originarios del estado autónomo de Cachemira.