El drama de la inmigración vivió este fin de semana dos nuevos episodios. Un inmigrante nigeriano murió ayer sábado cuando era deportado a su país en un avión de línea, mientras que una subsahariana abortó cuando viajaba en una patera rumbo a Canarias.

Fuentes policiales explicaron que el primero de los sucesos tuvo lugar tras despegar del aeropuerto de Madrid – Barajas. Los agentes que custodiaban a Osamuyi A., de 23 años, avisaron a la tripulación del Airbus de Iberia de que el detenido había muerto. El comandante del aparato decidió tomar tierra en El Altet, en Alicante, el aeropuerto más próximo, para proceder al desembarco del cadáver.

El juez de guardia de Elche ordenó el levantamiento del cuerpo y su traslado al instituto de medicina legal, donde le será practicada la autopsia para determinar las causas de la muerte. Tras este suceso, Iberia tuvo que preparar otra aeronave para que los más de 90 pasajeros que iban en el aparato pudieran continuar su viaje hasta Lagos.

Expulsado de España

Según la policía, el detenido había sido expulsado de España por orden del juez de Instrucción número 1 de Fuenlabrada. El joven nigeriano había sido detenido en once ocasiones por presuntos delitos de agresión sexual, robo con violencia, daños, amenazas, resistencia y desobediencia a la autoridad.

Por otra parte, una inmigrante se recupera tras haber abortado ayer sábado cuando viajaba en una patera hacia la isla de Fuerteventura. Fuentes policiales explicaron que la mujer, que navegaba junto a otros 35 inmigrantes, perdió al hijo que esperaba durante la travesía. La inmigrante fue atendida por otras dos mujeres que viajaban en la misma embarcación, una menor de edad, que tiraron el feto al agua. Uno de los ‘sin papeles’ avisó por teléfono móvil de la emergencia y un avión de Salvamento Marítimo consiguió localizar la patera, que fue interceptada por la lancha ‘Salvamar Mizar’.

La embarcación fue conducida hacia el puerto de Gran Tarajal, donde los sanitarios de Cruz Roja descubrieron que la mujer sufría una fuerte hemorragia. Por este motivo, la inmigrante fue trasladada hasta un centro sanitario, donde le fue dispensada una primera atención antes de proceder a su ingreso en el hospital general de Fuerteventura.

En el día de ayer, un cayuco con 139 inmigrantes llegó a Santa Cruz de Tenerife remolcado por Salvamento Marítimo, que lo había localizado a unas 30 millas del litoral. Los tripulantes eran todos varones africanos, estaban en aparente buen estado de salud y entre ellos había nueve menores.