Redacción
Las Palmas- Una inmigrante embarazada de unos tres o cuatro meses abortó el sábado en una patera en aguas próximas a Fuerteventura, en la que viajaban otros 35 inmigrantes, según informaron ayer a Efe fuentes de Cruz Roja, que indicaron que otra embarcación llegó también a Gran Canaria con 15 magrebíes. La mujer perdió el bebé durante la travesía y el feto fue arrojado al mar, relato que fue corroborado por las otras dos mujeres que viajaban en la patera, una de ellas menor, de unos 14 años.
La inmigrante, que sufría una hemorragia vaginal cuando fue atendida por los efectivos de Cruz Roja a su llegada al puerto de Gran Tarajal (Fuerteventura), fue trasladada primero al centro de salud de la citada localidad y posteriormente al Hospital General de la isla, donde permanece en estado estable, señalaron fuentes del centro. Las fuentes de Cruz Roja indicaron que prestaron atención sanitaria a otros cuatro ocupantes de la patera.
Por otro lado, un cayuco llegó ayer tarde a Tenerife con 139 inmigrantes a bordo, entre los que viajaban seis menores, según informaron a Ep fuentes de Salvamento Marítimo y de la Guardia Civil de Tenerife. Todos ellos de origen subsahariano arribaron en aparente buen estado de salud.
La embarcación fue avistada en un primer momento desde la costa a la altura de Arico, en la zona oriental de la isla tinerfeña. El centro de Emergencias de 112 recibió varias llamadas alertando de la presencia de la embarcación. Para su rescate fueron movilizados un helicóptero del Gobierno de Canarias, una patrulla de la Guardia Civil, dos embarcaciones de Salvamento Marítimo y una de la Cruz de Roja.