En sólo 30 minutos, entre las siete y las siete y media de la mañana de ayer, los 26 náufragos subsaharianos que el remolcador Montfalcó había rescatado cinco días antes en aguas próximas a Malta fueron transbordados al buque de Salvamento Marítimo Clara Campoamor. La maniobra fue llevada a cabo 40 millas al suroeste de Marsala (Sicilia). El Ministerio de Fomento, del que depende Salvamento Marítimo, aseguró que todos los sin papeles se encuentran en buen estado. El Clara Campoamor tiene previsto atracar mañana en Tarragona.

El encuentro entre ambos barcos se produjo ocho horas antes de lo previsto, gracias a la mejora del estado de la mar. El Montfalcó, al que un fuerte temporal de proa impedía el miércoles avanzar a más de tres nudos, pudo incrementar durante la noche su velocidad hasta nueve nudos, y el Clara Campoamor logró alcanzar los 15.

Tras ser trasladados al buque de Salvamento Marítimo, los inmigrantes recibieron ropa, calzado, mantas y alimentos. Varios de ellos se encontraban mareados. El armador del Montfalcó declaró que si no comieron mientras estuvieron en su barco no fue por falta de víveres, sino porque estaban mareados.

El Consejo General de la Abogacía emitió ayer un comunicado en el que, tras elogiar la labor del Gobierno español en el rescate, muestra su preocupación por la actitud de Malta, Estado que al rechazar a los sin papeles “delegó gravemente su deber de acoger a los náufragos”. El Consejo entiende que “deberían promoverse las correspondientes demandas de condena ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y ante la Comisión Europea por trato inhumano”.