Un total de 36 personas víctimas de trata fueron liberadas en Euskadi durante 2020 por la Policía Nacional y la Guardia Civil, según los datos recogidos en el balance anual de la actividad policial publicado por la Delegación del Gobierno en el País Vasco. La mayoría de ellas son mujeres y, en menor medida, niñas. Y, en concreto, «mujeres migrantes», puntualizó ayer Amnistía Internacional Euskadi en el Día Europeo contra la Trata de Seres Humanos. Con motivo de esta conmemoración, esta organización denunció ayer que «la trata de personas es una grave violación de los derechos humanos y una forma de esclavitud moderna. Es un ataque a la dignidad, que implica violencia física y psíquica, que afecta sobre todo a mujeres migrantes».

En todo el año pasado, la Policía Nacional desarticuló 14 grupos delictivos vinculados a la trata de personas con finalidad sexual o laboral, que es «el tercer negocio más lucrativo del crimen organizado en el mundo, solo por detrás del narcotráfico y la falsificación», aseguraron responsables policiales en la presentación de este informe, referido a un año en el que la pandemia del Covid-19 hizo que el volumen de este tipo de actividad mermara respecto a 2019. Como dato, el informe ‘Trata y explotación de seres humanos en España’ editado por el Ministerio del Interior detalla que fueron ocho las víctimas de trata con un fin sexual contabilizadas en Euskadi en 2020, la mitad que en el curso anterior (17).

Las claves
Actividad. Euskadi, con ocho, es la sexta comunidad con más víctimas de trata con fines sexuales durante 2020

Cáritas. Detecta explotación sexual en el 27% de las mujeres que atiende e indicios en el 8%; solo el 1,7% fue identificado

Estas ocho personas sitúan al País Vasco como la sexta comunidad autónoma con más delitos de este tipo, por detrás de Andalucía (67), Comunidad Valenciana (19), Castilla y León (17), Murcia (12) y Baleares (9). Después figuran Extremadura (6) y Madrid (5). Y así, hasta un total de 160 víctimas en todo el Estado, donde Cantabria y Asturias son las dos únicas regiones en las que no se han detectado personas afectadas de trata con fines sexuales. Del total de 160, 145 eran mujeres adultas, 2 niñas, 12 hombres y 1 niño.

Por su parte, Cáritas considera que estas cifras estarían lejos de la realidad. Se basa en que, según informó ayer Europa Press, habría apreciado una situación de explotación sexual en 927 de las 3.202 mujeres a las que acompañó en 2020 (27%) y, además, halló indicios en 275 (8%) mientras que «solo el 1,7% han sido indentificadas formalmente» por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.