No ha habido implicada ninguna persona menor de edad tutelada por la Diputación Foral de Gipuzkoa en los sucesos que se han venido registrando a lo largo de los últimos meses en el distrito de Antxo. Así lo asegura la diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, quien añade que, por lo tanto, «no ha correspondido la adopción de ninguna medida».

Peña sale así al paso de las declaraciones realizadas por la alcaldesa de Pasaia, Izaskun Gómez, cuando a finales del pasado mes de agosto le solicitaba una reunión «urgente», con el fin de analizar la «grave situación» de inseguridad creada, según sus propias palabras, «por personas de origen magrebí alojadas en pisos tutelados» por la institución foral en Antxo.

Tanto Gómez como Peña celebraron poco después un encuentro, sobre el que esta última ha sido preguntada hace unos días en las Juntas Generales de Gipuzkoa.

«Desde el Departamento de Políticas Sociales no se va a poner en marcha ninguna intervención enfocada a las diferentes personas que viven en Pasai Antxo», insiste la responsable del departamento de Políticas Sociales, quien, al ser preguntada por cuántos alojamientos dependientes de la Diputación Foral hay en Pasaia, y a cuántas personas da servicio, respondió que existen ocho centros y 138 plazas en atención a todo tipo de contingencias.

También la Ertzaintza descartaría, al parecer, la participación de ‘menas’ en los diferentes episodios que han provocado inseguridad ciudadana en el mencionado distrito pasaitarra, como hurtos y amenazas.

Los autores de estos hechos serían individuos que se mueven por todo el territorio de Gipuzkoa, que ya han sido detenidos en anteriores ocasiones e investigados. El acceso de estas personas a Antxo se ve facilitado por la situación geográfica de dicho distrito y por la confluencia de distintos medios de transporte público.