Detienen en San Francisco a una madre y a su hijo tras enfrentarse a la Ertzaintza

Los agentes denunciaron al joven por estar en la calle «sin una razón justificada», según indican fuentes del Departamento de Seguridad

El Correo, ALAIN MATEOS, 31-03-2020

Una patrulla de la Ertzaintza ha procedido a la detención de una madre y su hijo esta tarde a las 16 horas en el barrio bilbaíno de San Francisco tras un enfrentamiento de ambos con los agentes. Los policías interceptaron al joven, de 22 años, que paseaba con una planta en una bolsa y tras no aportar este una razón justificada del por qué se encontraba en la vía pública, interpusieron la denuncia por no cumplir con la legislación del estado de alarma.

Cuando los miembros de la Ertzaintza se disponían a retirarse, el detenido se aproximó hacia uno de ellos y se dirigió en los siguientes términos: «Tengo coronavirus», según indican fuentes del Departamento de Seguridad que relatan lo sucedido, lo que desató el enfrentamiento.

Acto seguido, el agente empujó al joven y junto con la ayuda de su compañero procedieron al arresto por un delito de atentado contra la autoridad. Minutos después apareció en escena una mujer, resultó ser su madre, de 49 años, que según detallan estas mismas fuentes «obstaculizó el arresto» de su hijo, por lo que fue también detenida. En un vídeo, difundido por las redes sociales y grabado desde los balcones del barrio, se escucha cómo la madre afirma que su hijo «está enfermo» mientras se abalanza contra la Ertzaintza para tratar de liberar a su hijo.

Los agentes se vieron obligados a utilizar la porra para reducir tanto al hijo como a la madre mientras se podían escuchar los gritos de los vecinos que denunciaban un «abuso policial». «No puedes tocarla, hijo de puta», reprochaban algunos vecinos a uno de los policías por el trato que había dado a la mujer.

«Brutalidad policial»
La asociación SOS Racismo ha puesto el grito en el cielo al ver las imágenes que ha calificado como «brutalidad policial» contra un joven «racializado» que padece una «patología de salud mental». Desde la organización denuncian que el barrio está siendo objeto de una «militarización» que no sufre ninguna otra zona de Bilbao y exigen el cese de lo que ellos consideran «paradas racistas, abusos policiales y malos tratos, intensificado por las situaciones actuales de confinamiento».

Y las exigencias no se quedan ahí. «Amenazas hacia los vecinos que desde sus ventanas denunciaban la situación de abuso y brutalidad policial de la que estaban siendo testigos», denunció SOS Racismo a través de un comunicado.

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