La Policía Argelina de Fronteras (PAF) ha impedido la entrada en el país a la periodista y fotógrafa tunecino-argelina Ager Oueslati, a la que mantiene retenida desde anoche el aeropuerto de Argel, informó hoy a Efe la Asociación de la Prensa Extranjera Túnez.

Según la organización, a la que pertenece Oueslati, la reportera va a ser enviada de vuelta a Túnez, el país de origen de su padre, tras una orden del ministerio de Cultura argelino, pese a que según el diario digital “Tout sur l’Algerie” el documental que se disponía a realizar había recibido los permisos solicitados.

“El expediente de este documental fue validado por la Comisión de Lectura del Fondo de Desarrollo del arte, la técnica y de la industria cinematográfica (FDATIC) del Ministerio argelino de Cultura”, señaló.

El documental versa sobre las mujeres migrantes en Argelia, un tema muy sensible en un país que ha sido denunciado por diferentes organizaciones de defensa de los derechos humanos por sus restrictivas políticas de inmigración, que en muchas ocasiones violan la ley humanitaria internacional.

Según medios de prensa locales, la Policía de fronteras habría puesto problemas con su pasaporte argelino, que le corresponde por el lugar de nacimiento de su madre y puesto como excusa la nacionalidad tunecina de su padre, pese a que los tunecinos pueden entrar sin visado en el país.

Además de la nacionalidad tunecina y argelina, Oueslati posee nacionalidad francesa.

El incidente se suma a las detenciones de periodistas ordenadas por el gobierno argelino en el último mes, que han llevado a tres informadores locales a prisión preventiva tras ser acusados de difamación.

Uno de ellos, Adlene Mellah, editor de los diarios digitales “Algérie Direct” y “Dzair Presse”, sigue encarcelado aún ya que el tribunal ha rechazado la solicitud de libertad presentada por sus abogados.

Junto a Mellah fueron arrestados el pasado 23 de octubre los periodistas Abdou Semmar, director del diario digital “Algérie Part” y su colaborador Merouane Boudiab, quienes fueron liberados la semana pasada.

Además, el pasado 11 de noviembre un tribunal condenó a dieciséis meses de prisión efectiva y doce de libertad condicionada al periodista argelino Said Chitour, detenido en junio de 2017 tras ser acusado por el régimen de espionaje

Chitour, para quien la Fiscalía solicitaba un total de cinco años de presidio, trabajaba como corresponsal y ayudante de redacción para distintos medios extranjeros, a los que facilitaba el contacto con fuentes argelinas.

La semana pasada, una veintena de periodistas argelinos se reunieron en Argel para denunciar las malas condiciones en las que las que trabajan los informadores en Argelia y pedir al gobierno que autorice la formación de un sindicato.