Un teniente del Ejército alemán de 28 años ha sido detenido este jueves por orden de la Fiscalía de Fráncfort ante la sospecha de que preparaba un acto terrorista con fines xenófobos. Retorcido y meticuloso, como los personajes de la serie Mentes criminales", su objetivo era incriminar a los refugiados haciéndose pasar por uno de ellos.Destinado en el 291 batallón franco-alemán, con sede en la ciudad de Illikich, el oficial empezó a fabricar la vida que necesitaba en diciembre de 2015, cuando se registró como solicitante de asilo sirio en un centro de primera acogida situado en la ciudad de Gießen (oeste). Semanas después, en enero de 2016 presentó formalmente una solicitud de refugiado en Baviera. Se comunicó en francés con los funcionarios alemanes. Nadie cayó en la cuenta de que no hablaba una palabra de árabe, nadie se percató de que era un compatriota.
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Se le asignó una habitación en un albergue y comenzó a percibir las prestaciones de ayuda social correspondientes. “A partir de ahí, el detenido empezó a llevar una doble vida”, sostuvo la portavoz de la Fiscalía, Nadia Niessen.Según el diario Die Welt ?el oficial entró en el radar de las autoridades el pasado mes de febrero, tras ser detenido en el aeropuerto de Viena cuando se disponía a recoger en uno de los baños una pistola cargada que se sospecha había ocultado él mismo un mes antes.Fue entonces cuando ?se descubrió que el teniente había registrado una petición de asilo, una extrañeza que obligó a ampliar el campo de una investigación en la que pronto aparecieron conversaciones de claro contenido xenófobo y racista con amigos y compañers de armas. La sospecha de que preparaba un atentado que incriminara a los refugiados cobró fuerza.La detención del teniente en la ciudad bávara de Hammelburg mientras participaba en ejercicios de supervivencia, estuvo acompañada de una operación de registro en hasta 16 direcciones en Alemania, Austria y Francia. ?La Fiscalía no ha informado de los resultados de esa operación, en la que han participado 90 agentes.