Madrid. El PSOE no abordará este sábado propuestas económicas en clave nacional, porque ya lo hizo en una convención específica celebrada el pasado 25 de febrero, y tampoco entrará en cómo se organiza internamente el partido, porque tal y como están los ánimos es arriesgarse a una bronca. Aún así, en el apartado referido a la Unión Europea, recoge algunos asuntos que sí afectarían a la economía española si realmente pudieran ser desarrollados.

El más llamativo de los objetivos que se marca el principal partido de la oposición en ese ámbito es un seguro europeo de desempleo complementario al nacional financiado con los beneficios del BCE, el impuesto a las transacciones financieras y una fracción del impuesto de sociedades. También asegura que luchará para conseguir una interpretación más flexible del Pacto de Estabilidad y Crecimiento con el fin de que las inversiones no computen como déficit ante Bruselas.

El documento recoge también una reivindicación de los sindicatos: la de que se firme un marco europeo vinculante de salarios mínimos que se acerque al 60% del salario medio en cada Estado. Y, por cierto, deja claro que aboga por la «completa derogación de la reforma laboral del PP», un asunto que no se especificó en la ponencia económica y que sirvió a Pedro Sánchez para atacar a la gestora.

Refugiados por hambre

Los socialistas también han querido dedicar un apartado específico a los movimientos migratorios. «Defendemos – dicen – una política en positivo para este fenómeno que debe partir, en nuestro caso, de un nuevo sistema de asilo y protección ágil, seguro y eficaz». Así remarcan que España debe aprobar un número de solicitudes de asilo más acorde a su peso real en el marco comunitario, dado que, en estos momentos, subrayan, solo se hace cargo de un 1%

Además, abogan por consensuar una nueva definición del término refugiado que incluya a los «migrantes de supervivencia» y que incluya no solo a quienes huyen de la violencia, sino también a aquéllos que lo hacen de «hambrunas o también de cuestiones climáticas». Del mismo modo, reclaman un «esfuerzo multinacional de los países de destino para organizar y aumentar la cooperación con los países de origen».