DV. Dos menores del centro de acogida de Deba perpetraron la pasada madrugada destrozos y robos de escasa consideración en al menos quince vehículos en Azpeitia, entre turismos y caravanas. Los presuntos autores, de origen magrebí, fueron detenidos por la Policía Municipal y la Ertzaintza para posteriormente ser puestos en libertad. Se trata del segundo incidente de consideración llevado a cabo por adolescentes tutelados por la Diputación en menos de un mes en la localidad de la comarca del Urola. El pasado 17 de junio fue detenido otro joven del mismo centro tras robar en una cervecería y en varias sociedades. En aquella ocasión, otro chico pudo escapar.

Los hechos de ayer se produjeron entre las 3.30 y las 4.00 de la madrugada. Con la presunta intención de robar en el interior de los vehículos, los dos jóvenes rompieron varias lunas y ocasionaron destrozos en al menos quince automóviles y caravanas estacionados en los barrios de Santutxo, Salbe, Arana y Arana Goikoa, entre otros.

Indignación vecinal

El suceso provocó la indignación de los vecinos, que asisten impotentes a un aumento de la inseguridad en la población. Incluso el Ayuntamiento de Azpeitia emitió un comunicado en el que admite que «estos hechos demuestran que la inseguridad es un problema» en la actualidad. El alcalde de la localidad, Julián Eizmendi, recordó que «cada fin de semana se suceden acontecimientos de esta índole en los pueblos del entorno: Azkoitia, Tolosa, Zarautz, Deba, Eibar… Es un problema de seguridad y delincuencia, que no tiene nada que ver con el racismo», remarcó.

Tras tener conocimiento de los hechos, el primer edil se puso en contacto con el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y con el presidente de la Asociación de Municipios Vascos (Eudel), Jokin Bildarratz, ante quienes reclamó una reunión inminente de la mesa interinstitucional encargada de analizar la problemática ocasionada por estos jóvenes. Foro que reúne a la Diputación de Gipuzkoa (como tutor legal de los menores), Gobierno central, Departamento de Interior del Gobierno Vasco, Judicatura y Fiscalía, y que aún no ha sido capaz de hallar una solución o propuesta a la sucesión de robos y altercados provocados en los últimos meses por estos menores en diferentes localidades guipuzcoanas.

El alcalde de Azpeitia recordó en este sentido que Gipuzkoa está realizando un «gran esfuerzo» para lograr la integración de estos jóvenes, pero subrayó que «ante todo, debe preservarse la seguridad ciudadana». Reclamó que, en caso de ser necesario, «se cubran los vacíos legales» que permiten actuar con impunidad a una minoría de estos adolescentes, o que incluso «se cambie la normativa si hace falta».

Insistió en que «hablamos de actos delictivos, independientemente del origen de quien los comete, por lo que nada tienen que ver con el racismo», tras lo que hizo un llamamiento a la población a mantener la calma, recordando que la corporación municipal «hará todo lo posible por mantener la seguridad en Azpeitia».